Descubre en este post qué es la astenia primaveral, los síntomas de la fatiga primaveral y 5 claves para mantener la energía en primavera
¿Qué es la astenia primaveral?
Aunque todos podemos sentirnos más cansados en algunos momentos de nuestra vida, ya sea por estrés o por tener más trabajo de lo habitual, problemas personales, falta de sueño o incluso por falta de ejercicio, es muy habitual que cuando cambiamos de estación nos sintamos más cansados.
Puede parecer que la llegada de la primavera nos va a cambiar el ánimo. Pensamos que con la llegada del buen tiempo estaremos más contentos y con más energía. Los días más largos y pronto disfrutaremos del verano pero, en ocasiones, podemos sentir más cansancio de lo habitual, sin energía y una sensación de estar agotados.
Esto es algo normal y se conoce como astenia primaveral o fatiga estacional. Debemos tener en cuenta que la fatiga no es en sí una enfermedad, sino que es más bien una sensación con la que nos sentimos más cansados, agotados y falta de energía (1). Es cierto que estar enfermos, coger un resfriado o tener alguna infección vírica también nos produce ese cansancio y puede llegar a causar fatiga, pero debemos diferenciarla de esta fatiga estacional porque, por normal general, cuando la enfermedad termina, desaparece esa sensación (2).
El cambio de hora, que los días sean más largos y tengamos más tiempo para hacer más actividades, puede causar cansancio tanto físico como mental. Por norma general, dormir bien suele paliar esa sensación de agotamiento, pero si la fatiga persiste durante más de 4 semanas se debería ir al médico porque puede darse el caso de que se convierta en fatiga crónica (SFC) (1)
Síntomas de la fatiga primaveral
Sentirse cansado puede ser una consecuencia de la fatiga, pero no es la única, aquí podemos ver más trastornos que suelen aparecer en la primavera:
- Trastornos del sueño, dificultad para dormir o para tener un descanso reparador, lo que a su vez provoca somnolencia diurna y un aumento de la fatiga.
- Falta de motivación.
- Cansancio inexplicable, debilidad muscular, falta de energía.
- Problemas de concentración y dificultad para realizar las actividades cotidianas habituales.
- Falta de apetito.
- Irritabilidad, nerviosismo, cambios de humor.
- Dolores de cabeza más frecuentes o intensos de lo habitual.
- Apatía, tristeza injustificada, disminución del deseo sexual.
5 claves para mantener la energía en primavera
Según los expertos, prevenir la astenia primaveral no es tarea fácil. Debemos adaptar nuestro cuerpo a los nuevos ritmos que conlleva el cambio de estación para reducir al máximo las posibles alteraciones en nuestro bienestar.
1. Llevar una dieta equilibrada rica en vitaminas y minerales para combatir la fatiga y ayudar al sistema inmunitario.
2. Horarios ordenados. Es importante que los horarios, sobre todo de la comida y sueño, sean muy regulares, manteniendo los intervalos habituales.
3. Mantener las rutinas del sueño. El cambio de hora afecta a la secreción de melatonina, la hormona que induce el sueño y puede ocasionar alteraciones del sueño. Por eso es muy importante adaptarse al nuevo horario, una buena opción es cenar una hora antes de acostarse, que la habitación esté ordenada y tenga la temperatura adecuada y evitar dormirse con luz.
4. Realizar ejercicio físico, ayuda a combatir la apatía y es el mejor antídoto contra el cansancio. Además nuestro cuerpo libera endorfinas que mejoran el estado de ánimo para estar más positivos y reducir el estrés.
5. Ayudas para un extra de energía, como complementos alimenticios ricos en sales de magnesio.
1. https://medlineplus.gov/spanish/fatigue.html
2. https://www.cigna.com/es-us/individuals-families/health-wellness/hw/temas-de-salud/debilidad-y-fatiga-wkfat