En los meses más fríos es habitual que los niños se resfríen, se acatarren y empiecen a tener síntomas como tos o mocos. Dentro de los síntomas habituales, la tos es uno de los motivos más frecuentes(1) en consultas pediátricas.
¿Qué es la tos?
La tos es un reflejo causado por la irritación de las vías respiratorias. Es un mecanismo de defensa para limpiar las vías respiratorias y expulsar algo molesto, ya sean secreciones como los mocos, cuerpos extraños en el caso de atragantamiento o algo que se haya aspirado. La acción de toser está controlada desde el cerebro.
Causas de la tos
Existen distintas causas que hagan aparecer la tos en los más pequeños, pero lo más común es que sea por infecciones de las vías respiratorias. Hay que prestar atención a la duración de la tos, es decir si tras un resfriado común la tos persiste más de 4 a 8 semanas se puede considerar “tos crónica” y es importante acudir al pediatra para que pueda controlar los síntomas.
Tipos de tos en niños
La tos es un síntoma que resulta bastante molesto, sobre todo si persiste por la noche y no deja descansar bien. Es importante saber distinguir los tipos de tos que puede tener el niño para elegir el mejor tratamiento.
- La tos blanda o también llamada tos productiva es la que sirve para mover y echar las secreciones (flemas) aunque en muchas ocasiones, cuando los niños son más pequeños suelen tragar esas flemas. Es la más frecuente en resfriados y catarros, siempre acompañada por goteo nasal y suele ser más molesta por la noche y al levantarse por el cúmulo de mocos. Se considera como “tos buena” porque ayuda al pequeño a deshacerse de las secreciones.
- La tos seca es aquella que no conlleva movimiento de secreciones. Suele producirse por la inflamación de las vías respiratorias. Es la clásica tos de comienzo o fin de un resfriado. Es bastante molesta, especialmente por la noche. En ocasiones puede ser provocada por el propio niño, cuando se produce algún atragantamiento, como método de respuesta automática.
- Tos de “perro” es característica de resfriados que afectan a la parte baja de la garganta o cuando se producen laringitis. Suele venir acompañada de ronquera, afonía y a veces de un ruido áspero y agudo al coger aire.
La clave del tratamiento de la tos en los niños se va a focalizar en la causa que la provoca. Aunque la tos irá desapareciendo poco a poco, según la patología del paciente, existen pautas que pueden favorecer el alivio de la tos y las molestias que ésta puede ocasionar. Veamos algunas de ellas
Consejos para aliviar la tos en los niños
- Evitar ambientes secos, es importante que la calefacción en interiores no sea muy alta. Es mejor favorecer la humedad ambiental para que la garganta del niño no se reseque demasiado.
- Mantener una hidratación adecuada, beber líquidos frecuentemente.
- Baños de vapor o lavados nasales con suero fisiológico ayudan a limpiar la nariz y la garganta de mocos para que el pequeño no tenga esa tos blanda en la que tenga que expulsar las secreciones.
- Evitar espacios con humo y/o polvo que puedan irritar las vías respiratorias.
En cualquier caso, el tratamiento debe ser prescrito por el pediatra, que será quien pueda evaluar los síntomas y la gravedad de cada paciente
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